Siempre que sale en una tirada la carta XV, hay dos reacciones tipo: a) una gran carcajada o, b) miedo. Siendo el Tarot un espejo fenomenal, es capaz de reflejar los dos aspectos escondidos detrás de este personaje: portador de luz como de sombra. La imagen a la derecha da mayores pistas ya que el «monstruo diabolico» es en realidad un mascara ritual que este chamán azul interpreta junto con la deformidad de su mano. Solo es un calambre. Pero el bicharraco alado, cornudo, descarado, hermafrodita y ridículo, a algunos le impone o incomoda. Representa a un guardián, que quiere verificar si eres apto para la fiesta que va a venir en las próximas láminas. LE·DIABLE quiere que abras todos tus ojos y mires que limitaciones, ataduras y tonterías estás todavía llevando contigo a esas alturas del camino.

Me lanzo en dibujar mi versión del XV: ahora es aun más ridículo…Ricardo Cavolo lo transforma en lo que yo interpreto un langostino psiquedelico, pero siempre inquietante y se que al no cambiar la «mirada» hacia las cosas que me da miedo hacer…el Bodygard del Tarot no me va a dejar pasar a la gran fiesta que se celebra en La Casa Dios, la próxima carta, y entonces ya no podré ver ni Estrellas, ni Luna, ni Sol…

¿Que puedo hacer?¿Tengo que enfrentarme al langostino psiquedélico? y en este caso cómo puedo comunicar con este ser tan ecléctico? – La respuesta a esta pregunta era un show de lo mas divertido y surrealista, en la demostración que Cristóbal Jodorowsky solía hacer en sus talleres de Creatividad, en los tiempos en que fui su asistente personal. Entonces LE·DIABLE, canalizado por Cristóbal, empezaba a jugar..y su juego no tiene límite, moral, es sucio, tonto, infantil, descarado, animal. Los participantes de aquellos talleres se destornillaban de la risa, hasta que les anunciábamos que ellos también iban a ¡sacar el Diablo! ……Juro que he asistido a milagros: he visto a gente tímida, desatarse en exhibiciones de lo más exhilarante, porqué es tan liberador permitirse soltar los límites y desatar a la energía atrapada en nuestra visión caduca de la realidad a través de aquel ejercicio. ¡Los rostros brillaban!¡Los ojos brillaban! Porqué habían podido sacar al Portador de Luz, el aliado interior, que se esconde detrás de los miedos.

Tareas creativas: … por lo menos dibuja a tu diablo, permite expresarte como si fueras el superlangostino hermafrodita… experimenta. ¡Claro que «corta»! De eso se trata, de apostar por abrir paso a los limites de tu creatividad, saltarte los «que dirán» y ganarte el billete a la fiesta artistica que es tu vida. ¡A sacar el diablo!  Ponte en acción y ve en la practica que juicios hace tu cabeza a la hora de permitirte actuar en tu versión de Satanas, loco y desmadrado… ¡te sorprenderá!