En el viaje hacia el encuentro con uno mismo y la expresión de la propia autenticidad nos encontramos a menudo con el lema “sigue tu pasión” o “sigue tu felicidad”. Sin embargo como nos recuerda Elisabeth Gilbert autora de «BIG MAGIC» ( y del mas conocido «Come, reza y ama») la palabra pasión puede ser un aliciente para algunos pero un obstáculo para otros muchos.
La pasión y la felicidad son conceptos muy grandes, absolutos, apoteósicos, nos ponen frente a la idea que tener que sentir y vivir algo tan extraordinario que talvez no sea accesible un jueves por la tarde, con trabajo atrasado sobre la mesa y los calambres de la regla. Pues no nos ayudaría mucho seguir la pasión o sentirnos llenos de felicidad en un día como ese no? Según Gisbert un arma más manejable, fácil de encontrar (incluso en un día de perros) es la curiosidad. Sigue tu curiosidad. Puedo imaginarme sentir curiosidad por algo que atrae mi atención aún si no estoy en plena forma, donde nos resulta fácil distraernos…porque el instinto pone en marcha una búsqueda inconsciente y curiosea fuera del las fronteras de las obligaciones.
La pasión y la felicidad son rótulos luminescentes estáticos, tan grandes como los letreros de las calles de Las vegas, en cambio la curiosidad es un susurro, como la voz de nuestra compañera del colegio que nos llamaba el atención para mostrarnos algo divertido durante la clase.
Entonces dice E. Gilbert, la curiosidad es el antídoto al miedo, al bloqueo o el estancamiento y la que nos abre las puertas hacia el potencial creativo que llevamos todos en nosotros. No es la clase de creatividad ( y también si) de los pintores, escritores, decoradores y estilistas, sino la capacidad de encontrar nuevas soluciones creativas, nuevas ideas, innovando la manera con la que llevamos nuestra vida diaria.
Se trata de detectar esos momentos de efervescencia, estas burbujas de interés o el cosquilleo que sentimos por alguna cosa. Podríamos decidir confiar en las corazonadas o darle espacio a la intuición: aun sea por cosas erráticas, insustanciales o inconsecuentes. ¿Por que? Porqué la curiosidad es como el hilo de Ariadna que nos puede sacar poco a poco del laberinto del aburrimiento ( artístico, profesional, personal) seguimos el hilo sin saber a donde vamos y mientras estamos tejiendo una trama invisible a la que es posible respondamos con un ¡Eureka!
¿Quieres probar?
¿Cual fue la ultima cosa sobre la que te preguntaste algo?
¿Cual fue la ultima cosa que preguntaste solo por curiosidad (no cotilleo)?
¿Cuando sentiste por ultima vez un estado de “fluir” creativo, que te absorbió?
¿Que te encantaba hacer a la edad de ocho años?
¿Que pasaje de libro, pieza de música, obra artística o plato de cocina, paisaje…te inspiró en este último mes? Que es lo que te hizo sentirte atraido/a hacia ello?
Ahora que has contestado a estas preguntas ¿ de que quieres ser mas curios@?
Sigue tu curiosidad, confía y ¡disfruta!
«No tengo ningun talento en especial, sólo soy apasionadamente curioso.» A. Einstein